17 de febrero de 2010
EL PRIMER DIA
Ayer me amaneció roto,
de palabras y silencios
por dentro y por fuera.
Quizá no entendí
el saludo de la luz.
Me pareció gris.
Fue un día que salte
por encima de mi mismo.
Y crecí justo
para poder mirar por encima de todos los hombros,
de todos los sombreros,
de todas las cabezas.
Corrí tan rápido
que deje atrás
todas las sombras de mis otros "yo".
Y estire los brazos
hasta que pude por fin abrazarte.
Pero abrazarte toda. TODA.
¿Me escuchastes bien?
No solo lo que quería.
Fue ayer.
Ayer son todos los días que me quedan
para estar contigo
y me jode que amanezca roto
cuando pienso en tí.