Entre todas las voces, una,
reconozco la tuya.
De entre los truenos
y los gritos de silencio,
entre las multitudes
atropelladas por la prisa,
entre los árboles
condensados de vientos,
entre todas la voces, una,
reconozco la tuya.
Dentro de mil caracolas,
bajando a los infiernos,
en el fondo de las aguas,
por detrás de los espejos,
besando a luz de la luna,
suspirando al acecho,
entre todas la voces, una,
reconozco la tuya.
Diciendo que abril era perfecto,
que los versos abortan la lucha,
que los sueños mejor en voz baja,
que las mareas siembran dudas,
o que la pasiva del verbo amar
ni se consuela ni se conjuga,
entre todas la voces, una
diciendo ven,
entre todas la voces,
reconozco la tuya.